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lunes, 20 de mayo de 2013

OOOMMM




     Hacia tiempo que estaba pensando en hacer algo de ejercicio, todo el mundo me decía que para la tensión lo necesitaba. No pretendía correr los 100 metros lisos, ni siquiera volver a jugar al tenis, necesitaba empezar de nuevo a moverme, así que cuando nos hablaron a Maribel y a mi de las clases de yoga, nos tiramos de cabeza al asunto.
      La primera duda que me asalto fue el tipo de ropa que debía ponerme, siempre pensé que cada deporte necesita una indumentaria, no me iba a comprar un kimono de judo, que es lo primero que se me vino a la cabeza, pero el calzado........ seguro que era importante, solamente tenia una de esas zapatillas modernas que me trajo mi marido de EEUU. que con solo ponértelas yo creo que ya estas haciendo ejercicio, mas que nada para mantenerte de pie.
      Así que perfectamente maqueada, con los lichis talla única de mi hija y una camiseta talla XXXL,para disimular las lorzas, nos dirigimos al polideportivo del pueblo.
       El de la recepción, amablemente, nos dejo asistir a una clase para saber de que iba.
       De entrada todo el mundo iba descalzo, así que, ya no tenia que preocuparme de caerme sin hacer nada. La profe estaba bien, también era vintage,muy cariñosa nos aconsejo que hiciéramos lo que buenamente pudiéramos, creo que nos vio las pintas, cogimos una colchoneta cada una y al tema.
Todo en silencio "nos tumbamos en Malasaña, entendí yo" vamos boca arriba, y entonces empezó todo. Música de convento de clausura llamando a maitines, olor a incienso mezclado con pies, y para empezar un toque con el mazo en la ensaladera de Ikea.
 "Vamos a romper las telillas que se forman en las articulaciones" moviendo pies, manos, hombros, de todo. Los ruidos que se oían, mas que telillas parecían huesos de pollo cuando los partes para cocinarlo.
"Vamos a abrir la carótida"
Dios mio! esto va a ser un baño de sangre!
Y así toda la clase, abriendo y cerrando venas y arterias, rompiendo telillas y huesos, hora y media conteniendo la risa, intentando centrarte en tu cuerpo y no consiguiéndolo.Para terminar, el numero final del OMMMMM. Visualizando el punto "no-se-que" que es de color amarillo por lo visto
_"cada una que piense en un mantra que le ayude"
El mio:
Que no se me olvide comprar huevos
Que no se me olvide comprar huevos
En fin, llevamos un mes en clase de yoga, la cosa va mejorando por momentos, ya no tengo tantas ajugetas, y mi mantra ya es mas tranquilo.
Huevos
Huevos
Huevos.

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