El segundo, y por ahora el mejor, fue Teo, un Fox Terrier, vino en mal momento, Nacho estuvo enfermo sin poder andar y era muy pequeño, pero no importo, Teo sabia hacerse querer, lo malo era que tenia crisis de identidad, yo le ponía frente al espejo, para que se concienciara, pero nada, se creía un mastín. le encantaba el agua, seguramente su anterior reencarnación fue la rana Gustavo. Hay mil anécdotas sobre Teo, pero no se me olvidará cuando se tiro por la ventana del apartamento de Denia y fue a caer encima del pobre tío Ricardo!!
O las mil putadas que le hacia Ana de pequeñita, limpiarle los dientes con nuestros cepillos, cortarle el flequillo recién traído de la peluquería canina mas cara de Madrid, o vestirle de lagarterana, y Teo siempre quieto, sin decir ni guau.
Para que Teo no estuviera solo, cojimos a Leeloo, la perrita Fox Terrier mas guapa del mundo, la pobre se fue joven, pero el tiempo que estuvo se lo paso en grande imitando a el abuelo, ahora teníamos dos perturbados detrás de la manguera.
Al morir Teo,no quise ningún perro mas, pero no se como ( bueno si se) me convencieron para ir a la perrera y adoptar a un pobre cachorrito abandonado. Así llegó Dexter, o quizá tenga que decir" Charles Manson" . Realmente era un perro totalmente perturbado, si le decías "VEN" salia corriendo, Si le decías "TOMA" salia corriendo, si le ponías comida o agua, salia corriendo, en fin solo hacia eso, salir corriendo, y así durante meses, encima era negro como el sobaco de un grillo, cuando salias ,de noche todavia, a trabajar, como intentaba SALIR CORRIENDO, te tropezabas con él, le compre un collar fluorescente, por lo menos para saber en que dirección salia corriendo. Así pues salio hacia el mismo sitio de donde vino, la perrera, pero claro, tuvo que ser el padre el que pasara el trago.
Por último llego Parker el dia de mi cumpleaños, desde Cadiz, era una preciosidad, guapo a mas no poder, simpático, pero muy, muy desobediente, le dio por comerse todo lo que pillaba, ropa, toallas, la antena colectiva, y lo que mas le gustó de todo: El Mazda de Nacho. Se comió la antena, se comió la capota y antes de que Nacho se lo comiera a él, pedí socorro.
No se me ocurrió mejor idea que llamar a un programa de televisión en el que un argentino adiestraba perros y los dejaba como corderos, no cobraban nada, solo tenias que dar el permiso de imagen, porque antes había llamado a todos los adiestradores de Madrid, que cobraban un riñón por enseñar al perro a pasear por El Retiro,que fijacion!!!
Después de una primera entrevista del equipo (el artista no aparecía hasta el día del lucimiento) quedamos que vendrían un día en que estuviéramos toda la familia en casa.
El tío iba de "super star" nos hablaba como idiotas, como si no supieramos nada de nada, condescendiente con nuestra torpeza. El pobre perro le miraba alucinado, hacia lo que el decía, pero claro, yo también lo haría si me tirara al suelo, me pegara voces y no me mirara nada mas para meterme miedo, así que creo que tanto Parker como nosotros le dijimos a todo "Amen" no fuera a ser que nos pasara por la quilla.
Al final el perro siguió comiéndose el coche, aunque intentamos hacer todo lo que el iluminado nos dijo, la única solución fue el collar eléctrico, si, se que es una crueldad, pero tampoco le dimos tantas descargas, solo dos o tres, pero aprendió, eso o que que cumplió años y se tranquilizó.
Ahora tenemos un perro genial, no muy obediente, pero lo bastante para convivir en armonía. Y si vais a buscar el vídeo donde salimos con el argentino, no lo hagáis, me muero de la vergüenza.
Mi pobre Mazda ......
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